Dream till the end
CrazyAuthor♥
Rasshie; 라씨

I'm a crazy person who thinks that the world could be a better place.

I dream everyday with a prince who is from Korea.

Hope someday meet him. Wich i doubt about it xD

Love♥: 김재중

감미로운별




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Saturday, June 26, 2010
title Origami♥
time 9:30 AM
Siempre pensó en los demás antes que en sí mismo.
Siempre se preocupó por el otro aunque el fuera quien estuviera mal.
Y esta no fué la excepción.

Desde el primer momento en que lo vió supo que tenía que llegar a conocerlo más. En el fondo sabía que no solamente compartían cosas en común, sino que también la manera de pensar, de sentir... de sufrir.

Aquel día en que se levantó sintiendo esa extraña sensación de abandono, no fué capaz de salir de su casa. Todo por temor a que lo que más quería se fuera, se le escabullera por entre los dedos.

Y sintió miedo.
Y sintió tristeza.
Pero prefirió que su corazón escuchara e hiciera caso omiso a todas las preguntas que le hacía su mente.

"Tengo una enfermedad grave."

Y pudo sentir cómo su corazón se rompía, pudo escuchar cada pedazo chocando contra el suelo. Quizo gritarle, decirle, preguntarle si estaba bromeando. Pero no lo hizo. Sólo asintió levemente mientras le entregaba una sonrisa amarga de apoyo incondicional.

A un paso constante, podía observar a su alrededor, miraba a la gente caminar, aquellas parejas felices, aquellos padres con sus hijos, aquellos niños jugando en el parque. Pero no siguió pensando más las cosas puesto que ya sentía como el mundo le daba vueltas.

Cada día que pasaba veía como su sonrisa se opacaba, como el brillo en sus ojos ya no era el mismo, fue así como un día caminando por aquella calle que ya se la sabía de memoria, al observar una vitrina, ve una figura, una pequeña figura de cristal que brillaba sólo para él. Es así como su dormitorio se transformó en un nido de avecitas. Aves pequeñas, grandes, de colores, negras, de distintos tamaños y proporciones.

A cada una que terminaba les escribía un mensaje distinto. Una pequeña frase que ayudara a que volviera a sonreir. Cuando tuvo varios comenzó a dejarlos en la puerta de aquel ser que no se merecía esto y miraba escondido tras ese árbol confidente cuando recogía su regalo y veía esa pequeña curva en sus labios, signo de felicidad y dicha. Pero aún así su corazón seguía agonizando, soportando las ráfagas de viento que quería apagarlo pero no le importaba. No mientras él estuviera feliz. Porque si él lo era, definitivamente él también.

Fué así como un día se atrevió. Se prometió que nunca más se daría por vencido, porque si el lo hacía su más preciada persona en el mundo también lo haría y a paso seguro se posicionó frente a la puerta, aquella lámina de madera que lo separaba de su futuro, que lo separaba de la verdad.

"Esto es para tí".

Y sus manos temblaban, con tanta fuerza que casi con extrema torpeza le entregó aquel animalito de papel, pequeño como del porte de su palma, brillante como el sol que estaba sobre sus cabezas aquel día. Esperó a que lo leyera y a cada segundo de silencio, sentía que su corazón intentaba salir más de su cuerpo.

"Te Amo".

Y pequeñas lágrimas golpearon su mano. No podía asimilar lo que estaba pasando. Intentó darle una lógica, pero no pudo. Por lo que prefirió preguntar que le sucedía. Alegría, sólo alegría y vida le respondía el otro.

"Siempre te he amado. No me dejes nunca".

Y vino un abrazo fuerte.
Y vino el alma al cuerpo.
Y sintió como todo giraba en torno a ellos.

Suavemente limpió aquellas gotas de dicha de los ojos de su amor, de su amor por años y pudo sentir ese pequeño beso sobre su mejilla, ese pedacito de amor que ahora le entregaba como a nadie más.

"Nunca Junsu. Nunca".

Siempre pensó en los demás antes que en sí mismo.
Siempre se preocupó por el otro aunque el fuera quien estuviera mal.
Y esta fué la excepción.

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...Hope to the End...


Monday, November 23, 2009
title Doushite Kimi wo Suki ni Natte Shimattan darou?♥
time 4:28 PM
Sentía que su corazón iba a estallar. Cada paso que daba, era un estallido dentro de él. Y aunque quiso no dar importancia a lo que le estaba pasando, verlo acercarse nunca la pareció tan adolorido.

Verlo sonreir, verlo mirar a la gente, verlo tomar esa mano. Esa que no era suya, y que definitivamente nunca tomará le rompía el alma. Y quería salir corriendo. Quería escapar de esa cruel realidad que estaba viviendo. Si tan solo se hubiera atrevido, tal vez todo sería diferente ahora.

Y se congeló cuando aquella mirada penetrante se paró sobre él. Y no pudo aguantar más y amargas lágrimas comenzaban a aparecer de sus ojos. Más no quiso mostrar su debilidad. Sólo lo miró y sonrió. Pero aquella sonrisa no pasó despercibida. No para él. Sin nada más que hacer, le dirigió una última mirada y se fué. A algún lugar que lo mantuviera lejos de él.

Lo buscaba, dentro de toda esa gente tenía que estar. Quería verlo. Quería que disfrutara con él. Pero no lo encontró. No hasta cuando se dió por vencido y fue cuando pasó. Sus ojos se encontraron y aquella persona tan importante durante todo este tiempo lo miraba. Podía jurar ante todos que esa mirada era la misma que tenía cuando le contó que se casaba, que había encontrado el amor. Esa mirada de desconcierto y.. dolor?. ¿En que momento fué que sintió su corazón oprimirse?

Y quiso correr, pero no pudo. No cuando una mano lo mantenía en su lugar. Fué entonces que se dió cuenta. Por qué hoy, por qué en ese preciso momento, cuando le mostraba una sonrisa a labios cerrados y lo vió darse la vuelta e irse fué que al fin lo notó. Y por primera vez en su vida se cuestionó. ¿Qué era lo que realmente quería?.

Cada paso, cada latido iba apagándose, mientras otro iba haciéndose más fuerte, para darse fuerza y correr. Correr detrás de esa persona que simpre estuvo a su lado.

Mientras una disculpa nace del fondo del alma, un cuerpo siente que vuelve a la vida. Y cuando pensó que los sueños no podían hacerse realidad, sucedió. Aquel suave beso llegó lleno de amargura, lleno de disculpas, lleno de pena, lleno de esperanza, lleno de.. amor.

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...Hope to the End...


Saturday, November 14, 2009
title Lágrimas♥
time 6:24 PM
Dicen que los que se sientan bajo las estrellas y las miran, son amigos, mientras que aquellos que se sientan bajo las estrellas y se miran, son amantes, pero...cómo se les llama cuando hay uno, bajo las estrellas, mirando al otro que las está mirando? Sin duda, sólo puede ser tristeza.

Estabas tan cansado cuando lo conociste, que lo perdiste por accidente. Lo viste pero estabas cansado, y quisiste cantar y dormir y comer y demases, pero no pudiste verlo porque la vida era tacaña contigo, entonces estrechamente comenzaste la práctica de canto como cuando juegas a ganar y tienes esas agotadoras sesiones de entrenamiento.

-----

Cuando lloró, abiertamente y sin pudor, cuando ganaste tu primer premio, lo viste, y de repende no estabas mas cansado. Te sentiste vivo y te sentiste extraño que el sentimiento en tu corazón estaba derramándose por sus ojos. Fuiste a alcanzarlo, limpiaste las lágrimas de sus ojos pero no las limpiaste de tus manos en tu chaqueta.

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Cuando hacinaste una galleta en tu boca después de esa noche, porque estabas muy cansado para cocinar y todos estaban abatidos por las galletas de chocolate que dejaste escondidas, probaste la sal de tu pulgar. Viste hacia su lugar y lo pillaste mirando hacia atrás. Le sonreíste; el te sonrío de vuelta.

-----

Cada palabra que dijo cuando te acurrucaste bajo las sábanas juntos, fatigado pero necesitando algo más, una copa de conversación antes de ir a dormir, cada palabra parecía ser retirada de la punta de tu lengua y hablaba en el dulce calor que era su voz.

"Yoochun-ah", susurraste, cómplice y sonriente "vete de mi cerebro!".

"Lo siento" respondió, no en lo mas mínimo de disculpa, "es sólo muy divertidos estar alrededor". Rieron juntos como escolares con un secreto y se acurrucaron porque estaba demasiado helada la habitación. Tu estabas mas tibio que él, un hecho que sorprendiño a ambos y despertaste con su cabeza metida perfectamente debajo de tu mentón.

Te acostumbraste a él hablando con tu mente, y tu hablando la de él. Te acostumbraste a despertar juntos.

------

El era abierto en un modo que tú no, llorando y riendo todos los mismos momentos que tu podrías tener, si tu fueras el tipo que llora y ríe abiertamente. Te asfixias también pero no puedes hablar asi que mentienes tu boca cerrada. Él la abrió y tu admiraste su fuerza, su determinación. Él vive tan honestamente, tan libremente. Estaba mejor bailando los pasos de su realidad alrededor de los pies de otros que la coreografía que tenían que memorizar para el Viernes. Lo lograste por estar practicando juntos en el estudio hasta tarde, para después ir de incógnitos por una cerveza y un Bibimbap.

-----

Fue una de esas noches dónde decidiste poner esto, lo que fuera, en piedra. O carne, por así decirlo.

"Debería ser en el mismo lugar?" Hubieras preguntado porque querías su opinión, incluso pensaste que tenías la tuya.

"Hmm" dijo, pensativo y tirado en el piso de la sala con la cabeza sobre sus rodillas, "Yo no lo creo" dijo lentamente.

"Yo también" dijiste delicadamente, olvidando la conversación solo un poco mientras pasabas tus dedos por sus cabellos. "Creo..." dijiste.


"Hmm?" Dijo, girando su cabeza hacia tí y tu mirando arriba con esos curiosos ojos marrones.

"Sabes, puntos de encanto. Creo que debemos tenerlos dónde mejor nos quede a cada uno."

Él lucía un poco confundido, como si nunca hubiera considerado su punto psicológico como encanto antes. No se miró y observó lo que veías cuando lo mirabas.

"Creo que deberías tener el tuyo aquí", te dijo rápidamente, moviendo la mano suavemente hacia abajo por su espalda.

"Estaba pensando eso realmente" Sonrió. Le sonreíste de vuelta.

"Deberías tener el tuyo aquí" dibujó por sí mismo, y subió un brazo a tus hombros. Su mando se desplazó por el espacio entre tus omóplatos.

"Estaba pensado eso, también", sonreíste. Decidió no moverse y terminaste quedándote dormido de esa forma, con sus brazos alrededor de tus hombros, y los tuyos alrededor de su espalda.

Luego te dirigiste donde el tatuador luego de la práctica del día.

-----

Él estaba siendo él mismo, encantador y ridículo a la novena potencia, como si tu y los otros salataran sobre un parche de color verde, filmando el último DVD. Lo reprendiste, le dijiste que fuera más él, porque una parte es curiosa como si pudiera -quisiera- dejar que el mundo vea como es cuando está contigo.

Él dió una de esas miradas y luego volvió a la cámara- "A veces, YooChun-hyung sale de la ducha usando sólo una toalla y se queja JunSu-ah~ Estoy tan aburri-do~ y---"

Lo cortaste, ojos muy abiertos y una estúpida, incrédula sonrisa en tu cara. "Yah! No en cámara!" Lo regañaste. "No tienes que decir eso!" Lo golpeaste sin ganas, riendo, avergonzado, pero secretamente pleno. Él agarró tu cintura bailaste frente a la cámara, pero incluso si ellos cortaron la escena, tu lo persuadiste, llevándolo sobre tu espalda por lo que él acababa de decir.

Él corre en círculos tratando de marearte, pero te aferraste y cerraste tus ojos, y sentiste un poco como si volaras, borracho, en algún país.

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Te sentías estúpido ese día que al estilista se le ocurrió volver a oscurecerte el pelo y acomodártelo como TaeMin de SHINee cuando debutó. Intentaste lo mejor que pudiste para enfocarte en la performance, la energía, el premio que ganaron, pero estabas incómodo y no estabas acostumbrado a eso. Te sentiste más y más ridículo y no fué hasta que tu mano fue a dar a su cadera, tranquilamente y la apretaste un poco para darte cuenta que lo necesitabas, necesitabas un poco de calor humano para tranquilizarte. Y te sentiste más tú.

Él sonrió, con orgullo y ampliamente y fue cuidadoso contigo, hasta que fueron capaces de salirse del foco de la cámara.

Una vez fuera de la vista, él lanzó sus brazos alrededor tuyo y fué como si toda su emoción se derramara de una vez, en un choque de risas y llanto y alegría. Tu presionaste tu cara a su mejilla con lágrimas y entendió. Él te dió su chaqueta.

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Fué como un secreto especial, que los dos estaban lanzando canciones que habían escrito personalmente para el mismo single. Era algo para comentar bajo las sábanas como lo solían hacer, aunque en aquel entonces se trataba de todo lo demás, y no era el instructor de baile desagradable?- Y ahora estaba apunto de ver tus sueños hacerse realidad, juntos. No estabas perfectamente feliz con tu composición, pero se iba a vender e ibas a ganar por derechos de autor y no importaban que tan poco iba a ser el monto - estabas orgulloso.

Recordaste los tragos con auto-felicitaciones que no hubieran sido lo mismo si no hubiera estado ahí para compartir el éxito, y disfrutar del inexplicable sentimiento de logro que vino con ello.

Porque era muy obvio, no le dijiste, cuando el anunció que tu canción era su favorita de todos los tiempos en una tonta entrevista el día siguiente, que la canción no hubiera existido de no ser por él.

-----

Habían escrito cinco canciones cada uno, ahora, y era una carrera, una amistosa competencia para ver quién sacaba el próximo lanzamiento. Bailaste la idea de hacer una composición en conjunto, pero él te regañó con alguna de tus lyrics.

"Son tan trágicas, YooChun-yah" se lamentó "creo que debeías darle a esta un final feliz, por lo menos".
Te preguntaste que leyó en tu rostro porque te miró y cerró la boca y no dijo nada más acerca de cambiar la letras después de todo. Cuando se volvió a sentar en el piano y tu descansaste tu mentón en sus hombros, señalando algunas progresiones en los acordes, apretó su quijada e ignoró tus sugerencias y la música mas hermosa que alguna vez escuchaste vino de sus dedos. Él cantó las letras a tí.

Te estremeciste violentamente y derepente agarró tus brazos y los puso a su alrededor mas fuerte de lo necesario. Te empujó al banco del piano, un poco pequeños para ambos y presionó su frente a la tuya, para cuando las lágrimas aparecieron, no podías saber si eran las tuyas o de él.

-----

No te hubiera pasado que no hubieran podido ir juntos incluso cuando empezaste el servicio militar al mismo tiempo. Robaste momentos al teléfono, escribiste largos, muy largos, e-mails y susurraste "Te extraño" cuando lastimaba, psicológicamente, no tenerlo ahí. La confesión hizo eco con su voz y eso dolía aún más.

Dijo "Míralo del lado positivo, YooChun-ah. Por lo menos no estamos en guerra".

Después que colgaste, lloraste tan fuerte que tu estómago dolía y tu almohada estaba muy mojada para dormir sobre ella, y era mucho peor porque él no estaba ahí para pretender que las lágrimas era de él.

-----

Se sentía como si de alguna forma estuvieran apartados unas cuantas vidas, cuando al fin lo viste. Estaba caminando corredor abajo por la oficina y su pelo era corto pero aún caminaba con una arrogancia y era por eso que lo reconociste a la distancia.

"YooChun-ah!" lo llamaste, sin importarte que estabas en medio del pasillo y corriste hacia él. Y lo embestiste al suelo, pero no hubiera importado si no estuvieran haciendo un montoncito en el medio, riendo y muy muy felices. Él envolvió sus brazos alrededor de tus hombros y te apretó tan fuerte que no podías respirar y susurró entre el espacio, "Dios, es tan bueno verte de nuevo".

-----

Todos han crecido un poco menos tú, pensaste, después de otro trago de soju - perdiste la cuenta pero la basura de botellas verdes en la mesa entre tú y él te dieron una idea. Chocaron los vasos y bajaron el licor.

"YooChun-ah" dijiste, levantando el cigarro que estaban compartiendo de sus labios "Dónde te estás quedando?"

"Un Hotel calle abajo,hasta que encuentre un departamento" se hundió en su silla, mirando apenas el mar verde de vidrio. "Tú?".

"Calle arriba. En la casa de un amigo en Dobong" respondiste, imitando su postura. Estabas listo para dormirte en el taxi y posiblemente estafado a dar un autógrafo por un señor que reconoció tu cara de los posters de su hija en su pieza.

"Quédate aquí por la noche" YooChun dijo, lo miraste y sonreiste.

"Como los viejos tiempos" Dijiste.

"Como los viejos tiempos" respondióy robó el cigarro de tus labios, tomando una gran calada.

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Fue la primera noche de dormir bien desde que compartieron pieza hace dos años, con el resto del grupo en camas juntas.

Cuando la mañana llegó a romper la bruma de borrachera de tu cabeza, te quejaste y giraste, olvidando donde estabas. Tus piernas dieron con algo duro; tu pecho presionó algo tibio.

"Perdón" susurraste automáticamente, tus ojos abriéndose de a poco en shock por ver una cara familiar en tu -no, su- cama, después de tanto tiempo. Él parecía que se quedó dormido por tu invasion y te tranquilizaste un poco, aunque tu corazón latía con fuerza. Cuando él te atrapó con sus brazos y presionó su cara a tu cuello como lo solía hacer, te rendiste en tu pulso y te centraste en el ritmo de su respiración.

Estuvieron así hasta la hora de la cena, simplemente así.

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"Cuando me case," dijo un día, "quiero que cantes en mi matrimonio". Él dijo porque tu voz era lo más cercano a una bendición divina que conocía. Te dijo esto, sentado en una de las piezas de práctica en una banca que era muy pequeña para los dos.

Sonreíste, el tipo de sonrisa que la gente no entiende, tensaste las esquinas y cerraste los ojos. Era el tipo de sonrisa que haces cuando no quieres llorar.

Deslizó sus brazos alrededor de tu cintura y presionó su frente a la tuya. "Lo harás no?"

"Sí" dijiste casi al borde de las lágrimas y la sonrisa. "Lo haré".

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Cuando YooChun se casó, cantaste en su matrimonio y todos en la lista de invitados lloraron con tu melodía.

Cuando vino por las escaleras abajo, duchado por la derecha e izquierda con flores y arroz, alcanzaste un pétalo de sus pestañas y lo miraste con todo tu corazón, y te miró de vuelta y pensaste que fué tu imaginación que esa sonrisa tambaleó.

Cuando los dedos se su novia lo oprimieron y lo llevaron al principio de las escaleras, cuando lo besó y puso sus manos alrededor de su cintura, cuando se subieron al auto con el "Recien Casados" escrito atrás, permaneciste en las escaleras y miraste, aplaudiste y lloraste como todos ahí.

-----

"está embarazada" unos pocos meses después de su casamiento, la cuál los hizo mudarse. "Nadie debe saber, pero... Voy a tener una niña!, mierda, imagínate eso, Susu-ah!" sonrió tan grande que parecía que su cara de iba a romper y fuiste genuinamente feliz por él.

"Serás el padrino, no?" Te preguntó, tan orgulloso y emocionado que parecía que iba a estallar.

"Cómo sabes que es una niña?" Preguntaste, estancado.

"Sólo lo sé" Sonrió "lo harás, no?"

"Sí" acordaste y compartiste su entuciasmo.

Bebiste un brindis por su hijo-por-nacer y tomaste un taxi a casa.

-----

"Susu, es hermosa" estaba atemorizado a través de la línea y podías escuchar la expresión de su rostro. "tienes que venir a verla".

"Cómo está tu novia?" preguntaste, mordiéndote el labio, fuerte.

"Extasiada" sonrió cansadamente "tiene derecho"

Reíste, un poco fuerte para lo que o debías haberlo hecho.

"puedes venir mañana?" preguntó y odiaste el sonido, odiaste la expectante esperanza en su voz. "quiero que la veas antes que todos."

"Cómo se llama?"

"JunMi" El sonido de tu voz te recordó a las sesiones de composición a las 2am, su expresión cuando tocada una melodía fresca, inspirada y lució para tí como aprovación y entendimiento.

"Es hermoso. Lo escogió tu novia?"

"No, idiota. La llamé después de tí. Hermosa como JunSu".

No habían palabras para darle, recorriste todo el vocabulario. Sonreiste qesa sonrisa que nadie entiende pero que él no podía ver, y no pudiste mirarlo con todo tu corazón y explicarte. A diferencia de él no has vivido tu vida abiertamente y libremente y no pudiste bailar realidad antes de pisarte los pies, colgaste.

Lloraste hasta que estabas convencido de que ya no eran 70% agua, hasta que tu estómago dolió y tu almohada estuvo húmeda, tu voz se fué y no había duda en tu mente que esas lágrimas, esas lágrimas era solamente tuyas.

-----

No oíste sus mensajes de voz. Eran cuatro.

Después de 3 días, lo llamaste de vuelta y dijiste que tu teléfono había muerto, que olvidaste pagar la cuenta. Te preguntó si estabas bien, sonaste un poco cabisbajo. Dijiste que te enfermaste y probablemente no podías ir a ver a la bebé. Te disculpaste y colgaste.

-----

Él viene a tu puerta el día que te vas, maletas empacadas en la entrada y esperando por el auto del servicio en el lobby. El timbre te asusta y gritas "un minuto" antes de correr a la puerta por tus llaves, el banano en tu cintura. Usas lentes de sol y sombrero de fieltro para pasar desapercibido.

"YooChun" dijiste, esperando al conductor.

"Susu" dijo, mirándote por el todo de tu voz. "Feliz cumpleaños".

Lo miraste como si fuera un alien. Lo habías olvidado.

"Susu?" Dije frunciendo el ceño, avanzando y cerrando la puerta tras él. "Qué mierda está pasando?".

Sacudiste tu cabeza, apoyándote en la habitación y casi tropezando con tu equipaje de mano. "Tengo que alcanzar mi vuelo" dijiste, por negocios proque de otra forma te morderías la lengua y esa no era tu intensión.

"Susu" te dijo y ahora estña confundido y no le gusta. Toma tu brazo y te sueltas como si tu toque quemara. Con tus lentes puestos, no lo tienes que mirar.

"Dios, JunSu, qué te ha pasado?" te pregunta, y puedes jurar que escuchas su corazón quebrarse, cualquier parte que era dejada para tí. "Porfavor" su voz se quiebra y quema; él siempre había llevado la emoción debajo de su piel, "háblame". Luego nota la habitación, vacía con solo tú y él y el equipaje, y todo ahora logra un poco de sentido.

"Susu" dice tembloroso "me estas asustando más que la mierda".

El teléfono en la pared suena, la luz indicando la llegada de tu auto. El da un paso y lo apaga.

"Kim JunSu, si no me dices que está pasando, voy a--" dice "Nisiquiera sé que voy a hacer, pero no te dejaré salir de esa puerta".

Al fin sacaste el aire de alguna parte, "Me voy de vacaciones."

"Si claro" te responde inmediatamente "Con ningún lugar donde volver?".

"Así es" susurras, tratando de no atorarte porque eso no querias "Sin ningñun lugar donde volver".

"Dios, Su" y ahora está llorando, lágrimas bajando por sus mejillas y cuándo el comenzó y las tuyas se evaporaron?, Cuándo te volviste fuerte y el débil? O fué al revez? "Porfavor no hables así. Dime que está pasando". Se está absteniendo de tocarte pero puedes ver en él la lucha contra su impulso. Es la mejor opción. "Te lo ruego."

"YooChun-ah..." tu gargante se tapa como si fuera lija. "Voy a perder mi vuelo" susurraste.

"A la mierda tu vuelo" grita, enojado derrepente. "Siempre puedes tener otro. Pero de dónde voy a tener otro tú!?"

El impermeable lo estropeaste con esos Prada que tenías con el estremecimiento y colapsaste pero él te atrapó y terminaste en el suelo de rodillas y sus brazos alrededor de los tuyos, sosteniéndote tan fuerta que no podías respirar. Su frente presionó la tuya y tus lentes de sol desaparecen y las lágrimas que estaban en tus mejillas son tuyas y de él.

"YooChun-ah," su nombre te quema los labios, salados, amargos "no importa". No importa, le dices, una y otra vez.

Sacude su cabeza violentamente "Por la mierda si importa, Su, importa más que todo en este puto mundo. Más que todo, me escuchaste?".

"Más que esto?" Levantas tu mano, gentilmente tocas su anillo de bodas. El se mantiene firme.

"Que esto?" presionas tus manos contra su pecho, tus dedos encontrando la cruz de oro que lleva y el medallón con la foto de su hija en él.

Él está pensando en palabras, y mira en tus ojos con todo su corazón, una mano en su mano, la otra en su corazón y miras como se rompe a pedazos.

"Nunca fuí suficiente para tí, no?" preguntaste y besaste la lágrimas de sus ojos.

"Está bien" dices, la forma que usaste para confirmarlo, incluso si tus ojos lo negaban con cada lágrima que caía. "Está bien si no lo era. Pero ahora debo irme."

-----

La única cosa que YooChun nunca supo de tí, y eso fué lo descubriste en el siguiente vuelo que salía, que era, que a diferencia de él, tu nunca lloraste lágrimas de alegría.

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...Hope to the End...


Saturday, August 8, 2009
title Goodbye♥
time 2:25 PM
Capítulo 2


Y no podía creer lo que estaba viendo. ¿Cómo era posible que luego de unos buenos "Buenos días" con su amor, se tornaran en unos no tan buenos ya?

- Susu... no.. no creas que yo..- y cada paso que daba era un latido menos a la vida de su corazón. Porque verlo alejarse y derramando lágrimas lo mataba lentamente. Quería decirle que solo la amaba a él y nadie más. Que sólo él era el dueño de su corazón. Pero no podía. Pensaba que cada intento sonaría a excusa.- JunSu porfavor escuchame, no es lo que tú piensas, no es..

- QUE NO ES LO QUE YO PIENSO!? VETE DE AQUI!- y ese ataque de histeria y ese portazo lo dejaron totalmente en blanco. Ya que para cuando reaccionó, no había nadie en la sala. Sólo el y un silencio insoportable.

- Creo que... nunca debí a ver venido- esa tenue voz que salía desde detrás del sofá y esa mirada aún más opaca que cuando apareció por la puerta hace solo unos instantes atrás.

- Si Jae.. porfavor retirate -mientras se dirigía a él y lo tomaba del brazo para dirigirlo a la salida- Creo que no fue el mejor momento para hablar, si quieres que hablemos llámame. Cuando estes mas calmado y cuando no estes confundido con tus sentimientos.

- Pero Chun.. yo no estoy confundido, yo te amo.. como siempre que no lo en..

- No Jae, tu no me amas, tu crees que soy tu propiedad cosa que no es así.. Ahora retírate. Nos Vemos.

Y el sonido de la puerta cerrarse no solamente lo dejó sin saber que hacer, sino que también al rubio le indico el sonido de que algo debía hacer.

- Juro que terminaras conmigo de nuevo, park yoochun- decia en su mente mientras se alejaba de aquel edificio y subia a su auto.

Mientras que en aquella muda habitacion donde se encontraba mirando esa puerta que se había cerrado horas atrás. Esperando que saliera, porque lo haría ¿Verdad?. Y si no salía, él intentaría entrar como fuera para decirle que realmente en su mente no hay nadie más que él.
Así fue como de pronto sintió el seguro de la puerta sonar y no tardo en tomar la perilla y girarla para encontrarse con una imagen que esperó nunca volver a ver. Sus ojos rojos y casi cerrados completamente, sus mejillas extrañamente pálidas con los rastros de las lágrimas ya secas, y un tambaleo que lo desconcertó.

- JunSu, amor.. porfavor entiende, no es lo que tú crees. Yo no haría nada para dañarte. Te amo ¿Me escuchas? Te amo como nunca pensé que amaría a algu---

- Lo siento

- No lo sientas, yo lo siento por hacerte creer cosas que no lo son - Y lo abrazaba estrechamente.

- Lo siento... Chunnie... yo lo.. siento...mucho- Su voz iba dismuyendo y sus ojos se cerraban, mientras sus brazos caían a ambos costado de él y perdía el equilibrio.

- ¿Qué estas diciendo Su? ¿Por qu-- Y sus ojos se abrieron todo lo que pudo cuando encontro ese pequeño pero pronfundo corte en su muñeca derecha.- ¿¡Por qué!? ¿¡Por qué te hiciste esto!? ¿¡JunSu!? ¡CONTESTAME! ¡¡JunSu ABRE LOS OJOS!!

Y sin seguir pensándolo toma una polera que tenía al alcance y como pudo la rompió y se la ató a la muñeca para que no sangrara más. Le beso por sobre el tela para tranquilizarlo y lo subió hasta su espalda, le agarró firmemente las piernas y lo llevó al estacionamiento. Lo sentó en el asiento de atrás y le puso el cinturón.

No podía no mirarlo a través del espejo retrovisor. ¿Cómo fué que hizo eso? ¿Por qué a tal extremo de dañarse así mismo? Y como si su cabeza hubiera sabido de antemano que se preguntaría tales cosas, la respuesta llegó. Recordó ese día en la cuál le pediría ser su novio oficialmente. Ese día el cual serían felices por el resto de los días y nadie ni nada los separaría. Oh sí, podía llegar a ser tan cursi cuando se lo proponía y una pequeña sonrisa se dibujó en sus labios al pensar eso.

**FLASH BACK**

- Su-ah, ¿Tienes libre esta tarde?

- Hola, después de las 18 50.. Ya sabes, tengo visita con el psicólogo- Decía y YooChun pudo sentir esa tristeza en su voz, porque no era normal que él fuera así.

Siempre mostraba una sonrisa, desde que lo conoció que no puede creer como ese ser tan brillante, alegre e hiperactivo podía llegar a sufrir de manera tan fuerte, pero nada de eso hizo que sus sentimientos por él cambiaran, al contrario, la necesidad de protegerlo y estar con él a todo momento crecían cada vez más.

- Dale!, juntémonos en el café que está cerca de tu casa, ese nuevo.

- Ok, nos vemos Chunnie~!

Su nerviosismo creciendo a medida que pasaban los minutos. Sentía que su corazón se saldría de la ansiedad que tenía, era tanto así que llegó media hora antes. Pidió un capuccino y esperó mientras pensaba en todo lo que vendría y es que el hecho de pensar en que tal vez no correspondiera sus sentimientos lo ponía triste. Pero no sucedería eso, creía... o mejor dicho, sabía que JunSu sentía lo mismo que él. Y rió al darse cuenta de la seguridad que estaba tomando. Es que solo quería verlo, decirle que lo amaba como nunca pensó y abrazarlo. Porque con eso sería infinitamente feliz, porque con eso no pedía más.

- Lamento la demora- Y recién ahí se dió cuenta que lo tenía frente a él.

- No te preocupes, ni sentí los minutos- Le respondió con una cálida sonrisa, que hizo que el pelirrojo sintiera como sus mejillas se encendían ligeramente y tomara asiento mientras nerviosamente se mordía el labios inferior.

- Su... tengo que... decirte algo muy importante para mi...- El silencio reinó por unos cuantos segundos.

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Tuesday, August 4, 2009
title Goodbye♥
time 8:00 PM
Capítulo 1


¿Cómo era posible que algo así haya sucedido? ¿Cómo fue capaz de dejar que esto pasara? Cuando siempre pensó que su amor, su eterno amor, debía ser quién le diera la satisfacción de aquello que tanto deseaba. Como fue que todo termino así. Por una estúpida salida y por culpa de su personalidad de no poder negar algo, es que termino donde está. Si sus amigos, o eso creía que eran, no le hubieran ofercido unos tragos, tal vez todo sería diferente. Tal vez ahora estaría en su casa, tranquilo, con ese ser que tanto ama y estaría preparándose para dormir a su lado, como todos los días. Abrazado a él. Besándolo como siempre lo había hecho. Dándole esas buenas noches y esos buenos días con amor. Estaría diciéndole la verdad más grande que existe. Que lo ama. Como nadie lo hará. Que lo ama y lo amará hasta cuando sea viejito y el también. A su lado.


Sentía mucha impotencia, mucho dolor, rabia, tristeza, pero por sobre todo.... culpa, porque él pudo negar esas acciones, pudo haberse negado a seguir ese juego, pero no lo logró. Por mas que lo intentó, no lo logró. La cantidad de alcohol que tenia en ese momento era tanto, que sus sentidos se nublaron y solo pudo seguir la necesidad, esa necesidad de sentirse deseado. Y no aguantó, su cuerpo reaccionó a lo opuesto que su mente decía. El miedo y la desesperación crecían. ¿Qué le diría? ¿Cómo excusaría algo que el mismo quiso?. Miedo... mucho miedo.. No tenía palabras parar enfrentarlo... nisiquiera para verlo. Pero ahí lo tenía, frente a él. Preguntándole una y otra vez como fue posible de haber dejado que pasara esto.


Una lágrima tras otra, una mil veces más dolorosa que la anterior. Porque más miserable no se podía sentir. Aquellas palabras que una y otra vez rebotaban en su mente. Y que no lo dejaban dormir por las noches.

- Me decepsionaste. Nunca pensé que serías así.

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- Hey Su-ah! Mañana es nuestra junta de todos los años, lo recuerdas?.. YeongMi te manda a decir hola y que dejes de hacer cochinadas.... vamos su-ah, contesta!... -silencio- aish, ya bueno.. debes estar muy ocupado haciendo quien sabe que cosa. Los chicos quieren juntarse a las 20 en ese bar que nos llevo SungHee cuando nos graduamos, ya sabes, ese con la pista gigante para bailar. - bip- oh rayos! se acaba la llamada... cuidate, no lo olvides!!... escucha pronto esto! -bip, bip,bip- nos vemos mañ... -bip-

- jaja cochinadas... -decía mientras besaba esa superficie suave y tibia que tanto amaba- siempre con sus ocurrencias esa YeongMi..-otro beso pero esta vez en esos labios que ahora estaban entreabiertos y deseosos de ser atendidos-

- ¿Cómo fué que terminamos así?- Levantándose hasta apoyarse sobre sus codos, con la mirada fija en aquellos ojos oscuros- ¿Cuándo fué que cambiamos roles eh?.. Auch, vamos, sabes que bromeo.

- Ya era hora que te tocara ser el pasivo no Chun? - Apoyando sus manos sobre sus hombros para volver a acostarlo mientras dejaba pequeños besos por su cuello, nada muy brusco para no dejar marcas- Ya verás lo bien que se siente.

- Jajaja ¿O sea que te encanta sentirme no? ¿Entonces por qué quieres cambiar roles ahora?- y esa mirada acompañada de un puchero que no podía soportar, lo amaba tanto, lo deseaba tanto que solo reaccionó a tomarlo por la cintura mientras ahora quedaba sobre su cuerpo semidesnudo.

- Chunnie malo, tu sabes que adoro tenerte, pero también deseo que tu sientas lo que yo cuando me haces tuyo - mirándolo con esa cara de cachorrito acompañado de una sonrisa traviesa y un brillo de lujuria que iba creciendo y que solo hace que YooChun se derrita.- Déjame hacerte mío esta vez Chunnie~

- Esta bien, esta bien... Pero sabes que debes to...- y el timbre que suena, mientras Junsu maldice por lo bajo por no alcanzar a escuchar esa frase..

- Pero sabes que debes que? - Mientras se sentaba sobre la cama al momento que el pelioscuro se levantó a ver quién era la persona que tocaba el timbre- Ya dime, dime... Chun~ no te hagas el sordo!

- Debes saber tomar las riendas -mientras se acercaba a su rostro para depositar un corto beso sobre esos dulces labios que el tanto adoraba saborear- Ya voy, ya voy!... Rayos, quién esta tan desesperado para tocar así el...

- Hola YooChun

-Que.. digo, tanto tiempo.. - y mas sorprendido no se podía sentir, sentía como su corazón latía cada vez más rápido, ¿Por qué? ¿Por qué sentía aquello? ¿Sería miedo, felicidad, incomodidad?

- ¿Bastante no?.. ¿Puedo pasar?

- Ah.. si, si claro... pasa, dejame ir a terminar de vestirme - y sale practicamente corriendo a su habitación en busca de ropa y tal vez decirle a JunSu que tienen visitas y que debería vestirse también- Su-ah.. tenemos visitas, vístete si para cuando quieras salir de la pieza no quieres que te vean así - y un pequeño beso que ya iba a preguntar quien era aquella persona que había ido a interrunpirlos, porque eso fue lo que paso, no?

- Que te trae por aqui Jae? - sentándose al lado del rubio mirándolo fijamente ya que desde que lo vió entrar por aquella puerta pudo notar un brillo opaco en sus ojos, un brillo que significaba que algo no esta bien con él.

- Yo se que.. que te debes estar preguntando que hago aquí... que.. que por qué despues de tanto tiempo vuelvo a buscarte pero.. -y esos ojos negros comenzaron a aguarse a medida que intentaba dar una explicación de sus repentina llegada- han pasado muchas cosas Chun.. desde que decidimos terminar, me costó tanto olvidarte, todos los días eran una tortura.. el no tenerte a mi lado, no verte, no escucharte, me hacía mal... Pero luego... luego.. ahora estoy con otra persona, pensé que tal vez si estaba con él lograría olvidarte por completo pero... no todo es tan facil..- y abrazándolo por el cuello mientras un suave llanto se escuchaba en la habitación- aun te quiero Chun.

- Jae -separándolo de su cuerpo para mirarlo a los ojos- yo sé que pasamos buenos momentos juntos, y que por algo de ambos decidimos terminar. Pero yo ya no te amo como antes, si te quiero mucho, pero nada mas que como los amigos que fuimos desde un comienzo. Que puedes confiar en mí. Pero nada más.

- Pero Chun.. no te imaginas como cada día que Min me hace suyo, te imagino en lugar de él. Te extraño tanto.. te.. te..- acercándose peligrosamente a esa boca que tanto hechaba de menos- aun te amo Chun..

- Jae no.. porfavor no ha..

Y el silencio reinó en esa habitación, hasta que un sollozo lejano se escuchó logrando que YooChun abriera aún más sus ojos si eso era posible y se separara bruscamente del rubio. Lenvantando la mirada para encontrarse con aquellos ojos cafes casi rojos del dolor que sentían al ver esa escena.

Se levantó para ir a su lado pero solo lograba que el menor retrocediera y se alejara cada vez más. Un paso.. otro paso.. más lejos...

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Wednesday, July 29, 2009
title Celular♥
time 10:21 PM
- Diga? - Conteste luego de darme cuenta que me llamaban.

- Jae... Dónde estás?- Sentía esa desesperación a traves del celular.

- Saliendo de la oficina, que pasa Min?

- Te extraño, ven pronto- Me dijo con una dulzura que me llamaba a correr hacia él.

- Yo también Min, nos vemos en 5 minutos, Te amo- Colgué

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title Herida♥
time 10:04 PM
Sentía como el frio le recorría la espalda y el sueño le llegaba a la cabeza.

Pero siguió mirando aquella foto que se habían tomado hace no más de 2 semanas.

- Te amo min- mientras acariciaba la cabeza del mencionado sobre la imagen. Y sin querer moverse, abrió aún más esa herida en su muñeca izquierda.

- Nos vemos pronto bebe.

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TVXQ's JaeJoong